La analista política Maribel Espinoza emitió una fuerte crítica contra la presidenta Xiomara Castro por su defensa abierta del gobierno de Nicolás Maduro, al que calificó como un “narcodictador” perseguido por la justicia estadounidense. Espinoza advirtió que esta postura podría acarrear graves consecuencias para Honduras, tanto en el ámbito diplomático como en lo comercial, jurídico y hasta militar.
En un mensaje difundido a través de su cuenta oficial de Twitter, Espinoza subrayó que la jefa de Estado debería adoptar una posición de neutralidad frente al conflicto que enfrenta Venezuela, en lugar de apoyar a un régimen vinculado a grupos catalogados como “terroristas” y narcotraficantes por Estados Unidos. Además, recordó a la mandataria su obligación constitucional, especialmente en los artículos 245 numerales 2, 3 y 4, que exigen evitar acciones que puedan perjudicar la estabilidad nacional.
Entre los riesgos detallados por Espinoza destacan el posible aislamiento diplomático similar al que ya afecta severamente a Venezuela, la pérdida de bancos corresponsales y restricciones en operaciones financieras internacionales, además de la imposición de estrictas regulaciones para empresas extranjeras que podrían limitar futuras inversiones en Honduras.
Asimismo, la analista señaló que esta postura incrementa la vigilancia sobre la seguridad nacional y podría complicar la migración legal de hondureños, así como exponer al país a sanciones por parte de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) de Estados Unidos y aumentar el riesgo de intervenciones militares relacionadas con el terrorismo internacional.
Maribel Espinoza concluyó alertando que “los graves errores diplomáticos” de la actual administración, evidencian una inclinación “anti democrática y proclive a narcogobiernos” que ponen en serio peligro la estabilidad y seguridad de Honduras.
Este pronunciamiento se suma a las preocupaciones expresadas en diversos sectores sobre las repercusiones que podrían derivarse de una política exterior que rompa con la tradición de neutralidad, en un momento en que las relaciones internacionales y la cooperación estratégica con Estados Unidos son vitales para el país.
