El presidente Trump dijo que indultaría a Juan Orlando Hernández, quien, según los fiscales, se asoció con traficantes de cocaína cuando era presidente de Honduras y está cumpliendo una condena de 45 años.
Juan Orlando Hernández, entonces presidente de Honduras, hablando en las Naciones Unidas en 2019. Su hermano, Juan Antonio Hernández, sería juzgado la semana siguiente en relación con una conspiración de tráfico de narcóticos.
El presidente Trump anunció el viernes por la tarde su intención de otorgar “un indulto total y completo” al expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, quien fue declarado culpable por un jurado estadounidense el año pasado de conspirar para importar cocaína a Estados Unidos en un amplio caso de drogas.
El anuncio del indulto se produjo en un par de publicaciones en redes sociales del Sr. Trump, quien ha opinado repetidamente sobre las próximas elecciones del país el domingo. Ya había respaldado a un candidato, el exalcalde del conservador Partido Nacional, Nasry “Tito” Asfura.
“Tito y yo podemos trabajar juntos para luchar contra los narcocomunistas y llevar la ayuda necesaria al pueblo de Honduras”, escribió Trump, quien pasaba el fin de semana festivo en su resort de Mar-a-Lago.
El Sr. Asfura, quien pertenece al mismo partido que el Sr. Hernández, dedicó gran parte de una contienda electoral muy disputada a cortejar a líderes en Washington, incluyendo a miembros del círculo íntimo del Sr. Trump. La causa del Sr. Hernández, quien también fue condenado por posesión y conspiración para poseer “dispositivos destructivos”, incluyendo ametralladoras, ha sido abordada por separado por figuras como Roger Stone, el operador político conservador.
El anuncio del indulto de un líder condenado por un caso de conspiración para el narcotráfico se produjo en un momento en que la administración Trump lanzó una agresiva campaña militar en el Caribe, que describe como una operación antidrogas. Más de 80 personas han muerto desde principios de septiembre en ataques a embarcaciones que, según funcionarios estadounidenses, transportaban drogas. Han aportado pocas pruebas que sustenten esta afirmación, y legisladores estadounidenses de ambos partidos y expertos han cuestionado la legalidad de los ataques.
La Casa Blanca no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
“FELICITACIONES A JUAN ORLANDO HERNÁNDEZ POR SU PRÓXIMO INDULTO”, escribió Trump en una de sus publicaciones el viernes, minutos después de regresar a Mar-a-Lago tras un día en su club de golf cercano. “¡HAGAMOS QUE HONDURAS VUELVA A SER GRANDE!”
El Sr. Hernández, figura destacada del Partido Nacional de Honduras, fue presidente de su país de 2014 a 2022. Al ganar la presidencia, Estados Unidos lo consideraba un aliado dispuesto, aunque con sus defectos. Sin embargo, su primer mandato estuvo plagado de escándalos de corrupción masivos que provocaron protestas generalizadas.
Su mandato también estuvo marcado por las tensas elecciones de 2017, cuando consiguió un segundo mandato a pesar de la prohibición constitucional de la reelección. Las acusaciones generalizadas de fraude desencadenaron manifestaciones y violencia poselectoral con la participación de militares, un período de disturbios en el que murieron casi dos docenas de personas.
Durante su segundo mandato, los rumores de conexiones del Sr. Hernández con narcotraficantes se intensificaron después de que su hermano, un exlegislador, fuera arrestado por cargos de tráfico de drogas en 2018 mientras visitaba Estados Unidos.
Durante el juicio posterior, la fiscalía afirmó que, durante la campaña para su primer mandato, el Sr. Hernández había recibido sobornos de narcotraficantes, incluyendo un millón de dólares de Joaquín “El Chapo” Guzmán, el conocido exlíder del Cártel de Sinaloa. El juicio dejó claro que el Sr. Hernández estaba bajo escrutinio de las autoridades estadounidenses junto con su hermano.
Menos de un mes después de dejar el cargo, en 2022, el Sr. Hernández fue arrestado y extraditado a Estados Unidos para enfrentar cargos de tráfico de drogas y armas.
Fue declarado culpable en marzo de 2024 y posteriormente condenado a 45 años de prisión . «Como presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández abusó de su poder para apoyar una de las conspiraciones de narcotráfico más grandes y violentas del mundo, y el pueblo de Honduras y Estados Unidos sufrió las consecuencias», declaró entonces el fiscal general Merrick B. Garland.
Desde que Trump asumió el cargo este año, la familia del expresidente ha intentado presentar su condena como una persecución política por parte de la administración Biden. Sin embargo, aunque el expresidente hondureño fue extraditado y condenado durante la presidencia de Joseph R. Biden Jr., la investigación sobre sus vínculos con el narcotráfico se llevó a cabo principalmente durante el primer mandato de Trump.
El investigador principal del caso contra el hermano del Sr. Hernández fue Emil Bove , entonces fiscal del Distrito Sur de Nueva York y más tarde uno de los abogados personales del Sr. Trump.
